Segundo intento de desecación de la Laguna de Antela

INTENTOS DE DESECACIÓN DE LA LAGUNA DE ANTELA – Lagoa de Antela

Primer intento de desecación aquí

2) JUSTO PELAYO CUESTA

EN 1848 LA R.O del Ministerio de Comercio Instrucción y Obras Públicas dispuso que se llevaría a cabo un reconocimiento de la Laguna, con la idea de establecer un presupuesto para desecarla, se pretendía convertirla en una zona productiva para su uso agrícola. Para las obras de desagüe la Administración intentó atraer el interés de empresas particulares apelando a los beneficios que se conseguirían con la obra y a las ayudas que se concederían.

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En 1850 Justo Pelayo Cuesta solicitó a través de un escrito a la Reina, los permisos para llevar a cabo las tareas de desecación de la laguna. En su solicitud explicaba las causas por las que consideraba que el proyecto de Toubes había fallado y presentaba la obra de desecación de la laguna como una tarea fácil, además se comprometía a asumir todos los costes a cambio de que se le concedieran todo el terreno que ocupaba la Laguna de Antela una vez quedará seco.

En 1850 a través de la R.O de 17 de junio se le concedía a Pelayo Cuesta una autorización provisional para el desagüe, con la condición de que en un plazo de dos meses aportase la fianza establecida. Sin embargo Pelayo Cuesta incumplió todos los plazos establecidos, argumentando que había surgido una alarma entre los empresarios debido a las protestas llevadas a cabo por los vecinos que mostraban su oposición a las obras de desecación.

Sin embargo Pelayo Cuesta seguía mostrándose comprometido con el proyecto y aseguraba que contaba con el apoyo de hombres de negocios, los Sres Partington y Edwards. Rico Boquete señala que es la presencia de estos socios es lo que hace que la obra adquiera un carácter de empresa capitalista.

Finalmente las sucesivas prorrogas que solicitaba Pelayo Cuesta y sus constantes incumplimientos de plazos, provocaron que un nuevo aspirante a empresario, Liberto Malagamba solicitara que le fuese retirada la autorización a Pelayo Cuesta y concedida a él. Finalmente el Consejo Real retiró la concesión a Pelayo Cuesta pero también desestimo la petición de Malagamba.